Cristina Oria
- Zita
- 30 ene 2017
- 4 Min. de lectura
Localización - Calle Conde de Aranda, 6, 28001 Madrid
Teléfono Reservas - 639 275 761
Kviar - no disponible en Kviar
Cristina Oria es el nombre que está en boca de todos, hija de los fundadores de Musgo y estudiante de Le Cordon Bleu en París, fundó su Catering hace unos años y obtuvo mucho reconocimiento por su foie, producto estrella e insignia de la Marca. Además del catering, abrió en Madrid una tienda gourmet donde poder comprar todos sus productos, gadgets variados de cocina y juegos de té y café maravillosos que buscan minuciosamente en sus viajes por mercadillos de Francia.


La tienda ya de por sí merece una entrada única pero además, desde estas navidades se ha convertido en un "concept store" donde en la primera planta sirven delicatessen de su propia cocina (puedes pedir cualquier plato a cualquier hora) de lunes a sábado de 10 a 21.30.

Ambiente
La decoración es muy cuidada imitando una cafetería parisina con mesas pequeñitas de mármol negro, lámparas y apliques dorados vintage, espejo ahumado y ladrillo visto. El espacio es pequeño aunque cuenta con varias zonas, incluyendo una esquinita con sofás de terciopelo. Las vajillas son todas verdaderos tesoros de múltiples estilos desde inglés con flores hasta rococó negras y doradas todas descavaladas pero con un orden estético entre todos los elementos bastante fuerte. El sitio no es muy grande y suele estar lleno por lo que es recomendable reservar. Se puede ir desde a desayunar, hacer brunch, merendar o cenar, o simplemente tomar un café. El ambiente de gente es variado desde jóvenes hasta señoras tomando el té.



Cocina
La cocina impresiona, no hubo prácticamente nada que me pareciera mejorable. La carta es reducida pero meten cada día un par de segundos por lo que siempre hay variedad.

Entrantes
- Nuestro foie mi cuit con dos tipos de gelatinas y pan de pasas y nueces 14.90€. Impresionante, entiendo perfectamente por qué se ha convertido en el buque insignia. Como pega, por poner algo, podría ser un poco más abundante la ración. Los panes son buenísimos, cortados muy finitos.

- Pan de cristal con tomate y aceite 3.50€. Perfecto para cuatro personas porque vienen cuatro tostados. Pan de cristal de verdad, no lo que suelen poner en muchos sitios, súper crujiente pero no duro y calentito. Perfectamente aliñado.

- Coca de pimientos caramelizados con queso de cabra 9.50€. Lo llaman coca pero la masa no es de coca, es más un tipo de hojaldre muy finito. Buenísima y calentita. Los pimientos muy bien asados y dulzones contrastan a la perfección con el queso de cabra más salado.

- Patitas de bogavente con panko 11.90€. De todo lo salado que pedimos es lo único que no me sorprendió, aunque también estaba bueno y era correcto, pero no es tan especial como el resto de platos que probamos. Viene acompañado por una especie de mahonesa especiada.

Principales
- Confit de pato con coulis de frambuesa, ensalada y puré de patatas 16.90€. Abundante, cocción en su punto y sabroso.

- Steak tartar con patatas de Carmen 16.90€. Muy tierno, se deshace en la boca y poco picante.

- Pechuguitas de pollo rellenas de foie con cebolla caramelizada y manzana con arroz 16.90€. Este fue mi plato y me pareció impresionante aunque es un plato para comer muy de vez en cuando porque lleva mucho foie. Muy abundante, de hecho no pude acabarlo.

Postre
- Tarta de limón 6.50€. "LA TARTA (con mayúsculas)" supera a la de Embassy que venía siendo hasta ahora mi tarta favorita. No puedo decir nada más. Hay que probarla.

- Tarta de doble chocolate 6.20€. Me hizo gracia porque me recuerda a una tarta que me hacía mi madre de pequeña. Es de chocolate fuerte por lo que te tiene que gustar el chocolate casi negro para gustarte. La acompañan con un poco de merengue duro. Mi madre la servía con nata y me gustaba mas la mezcla porque suavizaba mucho el sabor así que creo que deberían cambiar el acompañamiento. Fue el postre que menos nos gustó.

- Paulova de Agatha Ruiz de la Prada 6.50€. Postre diseñado por Agatha. Bueno aunque le sobraba un poco de merengue.

Atención
Atención buena. Camareros jóvenes. Habiendo reservado, cuando llegamos la mesa todavía no estaba preparada y nos hicieron esperar 5 minutos, pero el espacio es pequeño y no hay hueco para ponerse y es un poco agobio. Agrada ver que está la propia Cristina y se pasea por las mesas preguntando a los comensales si les ha gustado la comida, etc...
Precio
Como siempre, los precios al lado de cada plato, y ticket. El precio medio para 4 personas fue 32€ sin vino, por lo que es un precio medio normal aunque con vino puede empezar a ser caro. Eso sí, cada € gastado merece la pena.

Experiencia y puntuación total
Como experiencia culinaria es totalmente recomendable, Cristina Oria impresiona y cada bocado es mejor que el anterior. El sitio es pequeño, pero con encanto y decorado con gusto. Además, traslada un poco a París, por lo que es un viaje en varios sentidos. La tienda es la perdición y me llevaría absolutamente todo (Cristina, si lees esto y me quieres regalar algo (por favor) por mi magnifica critica, puedes elegir lo que quieras porque todo me gusta =P). Las tartas se pueden encargar y además a precios muy competitivos. Si tuviera que poner una nota le daría un 8.5/10.


Love,
Zita
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